Espías de Sangre

¿Quién es Ysaac M. de Txiquerra?

Un escritor que lleva escribiendo desde hace más de treinta años con diversos seudónimos.

Un personaje que pretende que su obra sea la única protagonista y no quiere mostrarse.

Una persona que ha investigado y descifrado, durante más de ocho años, una historia increíble rodeada de secretos y cuentas desconocidas.

¿Cómo nace su vena escritora?

Cuando tenía diez años ahorraba para comprar libros. Así conseguí la colección completa de Emilio Salgari, que aún conservo, los cuentos de Chéjov, el Conde de Montecristo o Sinuhé el egipcio. Leía de todo, desde narrativa a poesía, también revistas que aún conservo de National Geographic y Scientific American. Lo uno lleva a lo otro, acabas escribiendo sin darte cuenta. o quizá sí lo haces, pero nunca pensando en que te vas convirtiendo en un escritor.

¿De dónde es?

Cuando nací lo tenía claro, de Las Arenas de Getxo, Bizkaia. en el País Vasco. Nací un seis de octubre de 1959. En seguida, con muy pocos años, mi familia se trasladó a Lima, al Perú de los sesenta. Allí fueron mis primeros pasos: la primaria, el colegio, los recuerdos imborrables de la infancia. Volvimos a España en los setenta. Estudié en Madrid hasta la universidad, en plena  «movida» de los ochenta . Me correspondió hacer el  «servicio militar» entonces obligatorio, durante casi dos años, en una Ibiza mítica, espléndida. Luego vino la incorporación al trabajo en Barcelona, México, Costa Rica, Colombia, Argentina... lugares donde hoy tengo familia y grandes amigos, Así, mi vida se reparte, casi al cincuenta por ciento, entre América y Europa. ¿De dónde soy? Me lo pregunto a menudo. Vivo en la isla canaria de Lanzarote, localizada geográficamente en África, frente a las costas de Marruecos y el Sáhara Occidental. Me recibió con los brazos abiertos hace más de veinte años y hoy me sigue enamorando con sus volcanes, los arrecifes, su olor a mar y sal, sus palmeras al viento, sus puestas de sol.... 

Sabía de donde era, sí, y ahora también lo sé, pero antes era de un sitio y ahora lo soy de muchos más.